Somos Bébhinn (Irlanda) y Norah (Vitoria), dos amigas que nos conocimos en el año 2001 mediante el mismo método de aprendizaje de inglés que ahora ofrecemos. La larga y profunda amistad que nos une, nos anima a llevar a cabo este proyecto en el que fomentamos el aprendizaje del inglés a través de la enriquecedora experiencia de convivir en Irlanda, inmersos en su cultura y sus gentes.
Nosotras personalmente seleccionamos los alojamientos y familias de acogida para asegurarnos de la comodidad y bienestar de nuestros viajeros. Con un trato personalizado, encontraremos la mejor opción para tu viaje de aprendizaje de inglés en Irlanda.
Bébhinn Coady
Soy una profesora de Artes y Manualidades que actualmente dirijo un negocio de clases para niños después del colegio, y clases para adultos de todas las edades a la tarde.
Durante los últimos 15 años, he dedicado mi tiempo como voluntaria, trabajando con niños. He viajado como responsable, con grupos de adolescentes en viajes con actividades alrededor de Donegal y en intercambios culturales y educacionales a lugares como Cornwall, el Norte de Irlanda y Bélgica. Conocí a Norah en el 2001, cuando vino a estar con mi familia aquí en Donegal. Hemos sido amigas desde entonces y se ha desarrollado un fuerte vínculo entre nosotras.
Entiendo lo importante que es para los niños sentirse arropados con gente de confianza durante su estancia en Irlanda, así como para los padres tener la seguridad de que sus hijos se encuentran en la mejor compañía, mientras aprenden Inglés. Desde aquí me encargo personalmente de seleccionar a las familias Irlandesas que acogen a los estudiantes, así como de organizar las variadas actividades y del asesoramiento para las familias y adultos que desean un viaje a su medida.
Norah Ezcurra
Tras varios años ejerciendo como Ingeniera, me he propuesto proporcionar, a jóvenes que quieran aprender inglés, la oportunidad de abrirse al idioma mediante la fantástica experiencia de inmersión en una familia Irlandesa.
Yo misma tuve la oportunidad de hacerlo hace ya muchos años y lo considero el punto de inflexión necesario para conseguir un acercamiento al idioma. No sólo resultó un cambio para mí, lingüísticamente hablando, sino que dicho viaje, cambió mi vida para siempre. Fue el viaje en el que, por primera vez en solitario, me sentí inmersa en una nueva cultura, con nuevas costumbres e idioma. Esto supuso para mí un gran enriquecimiento personal del que todavía hoy me enorgullezco. La convivencia con otra familia, al principio desconocida, resultó muy grata desde el primer instante, gracias a su cercanía, calidez e interés por mi bienestar y comodidad.
Podría resumir mi experiencia como las vacaciones en las que conocí a mi “familia Irlandesa” con la que todavía hoy, mantengo una estrecha relación, ya que nos visitamos periódicamente. Además, colateralmente, tras aquellas vacaciones el inglés dejó de ser una asignatura más para convertirse en un medio de comunicación. Tengo que decir que mi nivel de inglés no era demasiado alto a mi llegada, pero que en pocos días me vi parloteando sin ningún reparo y con total comodidad, cometiendo muchos errores, por supuesto, pero mejorando rápidamente.
Sinceramente, aconsejo una experiencia similar a aquellos jóvenes que por primera vez se animen a salir de casa, ya que la simpatía de los irlandeses no les dejará indiferentes, haciendo desintegrarse la aparente barrera lingüística.
Por mi parte, soy la encargada de la organización del viaje, así como del contacto con las familias españolas. No dudéis en presentarme cualquier duda que os pueda surgir y gustosamente os contestaré lo antes posible.